Hoy toca la oportunidad de conocer un par de grandes propuestas que si bien, muchas están en proceso de abrirse camino en la escena, sorprenden por su calidad, fuerza y propuesta
RIDER NEGRO
Rider Negro es un proyecto musical con tendencias Blues Rock y Progresivo, que se se identifica con el misticismo inherente del vagar y contemplar el desierto; de lo cual surge el personaje principal del primer álbum y de quien cuya reflexión nace el título de aquel: "The Echo of the Desert"
Rider Negro es un proyecto que ve la luz en los suburbios norteños de la Ciudad de México y su música posee elementos de introspección, misticismo y la búsqueda de respuestas acerac de nuestra Madre Tierra.
Su carácter mexicano es expresado en su música tras la utilización de instrumentos originarois de las antiguas culturas mesoamericanas manteniendo un pie en el pasado y uno en el futuro dando así a Rider Negro ese sello de originalidad propios de una banda que en los próximos años será referente de nuestro nuevo rock mexicano.
Rider Negro se autodefine como un Crisol de sonidos y lenguajes que muestran aquello que une, comunica y logra el entendimiento mutuo entre seres de conciencia. La atemporalidad de la cosmovisión nahua permite actualizarla y representarla mediante las ideas y estilos afines del rock psicodélico, conformando un acto que integra raíces y actualidad, la una como memoria preservando la lengua náhuatl y sus ritmos; y la otra como voluntad cohesiva inherente a los conciertos de rock plasmados en escena la musicalización de poemas y pasajes de orfandad del libro de cantares mexicanos mediante ritmos del blues, western y rock que poseen reminiscencia del estilo de finales de los 60’s; a la vez incorporando instrumentación prehispánica.
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